En LIBERTAS, condenamos enérgicamente la grave limitación de las libertades fundamentales y la falta de apertura democrática en Cuba.
Observamos con profunda preocupación cómo el pueblo cubano enfrenta no solo una crisis económica y social, sino también una restricción sistemática de sus derechos civiles y políticos.
Es inaceptable que el pueblo cubano se vea privado de su derecho a la libertad de expresión, asociación y reunión pacífica. La represión de la disidencia política y el activismo ciudadano es una afrenta a los principios universales de los derechos humanos y la democracia.
Instamos al gobierno cubano a respetar y proteger los derechos humanos de todos los ciudadanos, incluido el derecho a participar en un proceso político abierto y transparente. Es imperativo que se permita el pluralismo político y se promueva la participación ciudadana en la toma de decisiones.
La falta de una apertura democrática en Cuba socava la posibilidad de una solución pacífica y duradera a la crisis actual. Exhortamos al gobierno cubano a comprometerse seriamente con un proceso de reformas democráticas que incluya la celebración de elecciones libres y justas, el fortalecimiento de las instituciones democráticas y el respeto del estado de derecho.
Vemos con pesar las dificultades que enfrenta la población cubana, incluida la escasez de alimentos, medicinas y combustible, así como los cortes de energía generalizados que afectan la vida cotidiana de millones de cubanos.
Expresamos nuestro firme apoyo al pueblo cubano en su búsqueda de una vida digna y próspera. Reconocemos su valentía al enfrentarse a las difíciles condiciones y al levantar sus voces para demandar cambios significativos en el sistema político y económico de su país.
Es fundamental que el gobierno cubano escuche las legítimas demandas de su pueblo y tome medidas concretas para abordar las causas subyacentes de la crisis actual. Instamos al gobierno a emprender reformas que promuevan la apertura democrática, el respeto a los derechos humanos y la libertad de expresión.
En este momento crucial, llamamos a la comunidad internacional a solidarizarse con el pueblo cubano y a brindar apoyo humanitario para aliviar su sufrimiento. Es imperativo que se permita el acceso de ayuda humanitaria sin obstáculos y que se respeten los derechos fundamentales de la población cubana.
En este momento crítico, reafirmamos nuestro compromiso con el pueblo cubano y su lucha por la libertad y la democracia. Nos solidarizamos con aquellos que defienden valientemente los derechos humanos y la justicia en Cuba, y estamos decididos a apoyarlos en su búsqueda de un futuro más justo y libre.
¡Libertad, democracia y justicia para Cuba, ahora y siempre!